Situado en Boca Guamá, en la Ciénaga de Zapata, se encuentra el famoso Criadero de cocodrilos, una experiencia única que permite al visitante conocer a dos especies de reptiles de gran importancia en el país: el cocodrilo y el caimán.
El acceso a la instalación es una oportunidad única para comprender cómo es el proceso de cría de estos animales en peligro de extinción, además de informarse de sus costumbres alimenticias y particularidades de estas especies en la zona tropical. Este proyecto, primero de su tipo en el país como tarea ambientalista de la Revolución cubana en 1962, resulta de gran atractivo no solo por el impacto positivo en la ecología del país al mantener a los ejemplares en un hábitat seguro y protegido, sino también por la belleza de los alrededores que componen la zona.
Es apreciable como el éxito del proyecto también se puede observar en el impacto de la comunidad, la cual ha desarrollado toda una cultura alrededor de estos predadores de sangre fría, convirtiéndose en la principal atracción de la Ciénaga.